El gobierno regional sigue adelante con los planes de ampliación de la línea 11 de Metro que afectará al Parque de Comillas a pesar de la advertencia sobre los riesgos para la salud de la pérdida de masa forestal en el área urbana
Cerca de mil personas se concentraron el pasado 4 de Marzo en el barrio de Arganzuela de Madrid contra los planes de ampliación de la línea 11 de metro en la ciudad que supondrán la tala de hasta 300 árboles maduros y sanos en el parque de Comillas, en el cercano barrio de Carabanchel. Las obras coinciden con la publicación en The Lancet el pasado mes de febrero de un macro-estudio que estima que un 5,12% de la mortalidad estival de la ciudad podría evitarse si los árboles cubrieran un 30% del espacio urbano.
Familias con niños, ancianos y grupos de amigos alzaron pancartas a media mañana del pasado sábado 4 al grito de “No a la Tala” en el Parque de Madrid Río, no muy lejos del punto donde inicialmente se pretendía construir una nueva estación de metro a costa de la pérdida de árboles, obras que si se han conseguido paralizar gracias a la oposición vecinal. En la concentración, convocada por Ecologistas en acción, distintas asociaciones de vecinos y ciudadanas (entre las que se encuentran FRAMV o Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid, Asociación Pasillo Verde-Imperial o Madres por el clima, entre otras), se respiraba un ambiente de protesta y de indignación bajo la mirada atenta de la policía nacional que impidió que la concentración avanzará más allá de los límites del parque.
Entre los manifestantes se podían oír quejas sobre el afán lucrativo del gobierno de la ciudad, la desconfianza con los planes de trasplante de árboles por parte del Ayuntamiento y preocupación por el cambio climático y sus efectos. Y es que no solo están en riesgo 300 árboles en el parque de Comillas, sino que alarman también los planes urbanísticos en el parque de la Ermita del Santo, que podrían suponer la desaparición de hasta 4.000 metros cuadrados de zonas verdes en las inmediaciones del Río Manzanares.
Evelise Pereira, una de las autoras del estudio publicado en The Lancet titulado “Enfriando ciudades a través de infraestructura verde: una evaluación del impacto sobre la salud en ciudades Europeas” liderado por el Instituto de Salud Global en Barcelona explica las importantes conexiones entre el diseño urbano y la salud. Tal y como concluye en sus investigaciones, el acceso a zonas verdes puede proteger frente a la contaminación atmosférica y acústica y a las temperaturas extremas, evitando la aparición de islas de calor y reduciendo considerablemente la carga global de enfermedad como consecuencia del cambio climático. Puede además tener un efecto muy beneficioso sobre la salud mental y promocionar la actividad física saludable. El estudio recopila datos de 93 ciudades europeas en el año 2015 y estima la diferencia de mortalidad atribuible a islas de calor que podrían ser evitables con un aumento de reforestación urbana.
Entre las diez ciudades europeas con una mayor tasa de mortalidad asociada a islas de calor, se encuentran cinco ciudades españolas: Málaga, Barcelona, Palma de Mallorca, Sevilla y Madrid. Este hecho puede ser debido, tal y como ha puntualizado Evelise Pereire, a la combinación de una serie de factores: densidad poblacional, verticalidad, distribución de zonas verdes y la propia climatología y geografía local.
Según otro estudio en el que también ha participado Evelise Pereira y publicado también en The Lancet en el año 2021, el 69,72% de la población del área metropolitana de la capital de España no tiene acceso al mínimo de un 25% de zona verde recomendado por la OMS.
El aumento de zonas verdes es una de las soluciones basadas en la naturaleza que plantea también Matilda Van den Bosch en sus estudios, investigadora senior dentro del Instituto de Salud Global y médico con amplia experiencia en Urbanismo y Salud Pública. Las soluciones basadas en la naturaleza son aquellas acciones que, apoyándose en la naturaleza y en los ecosistemas, están encaminadas a proporcionar simultáneamente beneficios medioambientales, sociales y económicos. Matilda Van den Bosch defiende la presencia de árboles urbanos como una solución basada en la naturaleza muy efectiva y ha advertido sobre la pérdida de árboles maduros que es especialmente grave. “Son necesarios hasta 50 años para la recuperación de un tamaño y densidad con un efecto protector suficiente frente a los efectos del cambio climático”, ha puntualizado la científica, quien ha desarrollado gran parte de sus estudios en Columbia Británica en Canadá. “Cualquier política que no tenga en cuenta la importancia de plantar árboles en las grandes ciudades refleja una forma de pensar no muy adaptada a los tiempos modernos, sobre todo teniendo en cuenta los peligros del cambio climático”, ha sentenciado la también profesora adjunta de ciencias forestales y conservación de la Universidad de British Columbia (Canadá).
Preguntado al respecto, el Ayuntamiento de Madrid ha evitado hacer declaraciones. Por su parte, el gobierno regional ha asegurado en una nota publicada el pasado 23 de febrero que a pesar de contar con un informe favorable de impacto ambiental, modificará el trayecto de construcción de la línea 11 trasplantando el mayor número de árboles posible y encargando un análisis individualizado de cada ejemplar.
Mientras tanto, en un año electoral como este 2023, las protestas y concentraciones parece que van a continuar. El próximo día de 25 marzo, Ecologistas en Acción y un gran colectivo de asociaciones vecinales han convocado otra manifestación frente al Ayuntamiento de Madrid con el lema “Por un Madrid verde y habitable: fuera la especulación de nuestros barrios” reclamando un modelo diferente de ciudad y denunciando la creciente turistificación-gentrificación de los barrios, la falta de acceso a una vivienda digna y de acceso a zonas verdes de la ciudadanía.
Referencias
Iungman T, Cirach M, Marando F., Pereira-Barboza E., Khomenko S., Masselot P., Quijal-Zamorano M., Mueller N., Gasparrini A., Urquiza J., Heri M., Thondoo M., Nieuwenhuijsen M. Cooling cities through urban green infrastructure: a health impact assessment of European cities. The Lancet, published online January 31, 2023 2023. https://doi.org/10.1016/S0140-6736(22)02585-5
Pereira Barboza E, Cirach M, Khomenko S, Iungman S, Mueller N, Barrera-Gómez J, Rojas-Rueda D, Kondo M, Nieuwenhuijsen M, Green space and mortality in European cities: a health impact assessment study, The Lancet Planetary Health2021; 5: e718–30. https://doi.org/10.1016/S2542-5196(21)00229-1