Sergi Martín es el comisario de la exposición ‘Empieza el espectáculo. Georges Mèliés y el cine de 1900’.
Además de ser el comisario de la exposición, es guionista y escritor. En el ESCAC -Universidad de Barcelona- se especializó en guion. Ha desarrollado contenidos para documentales, campañas de comunicación y programas de televisión, tanto en España como en Estados Unidos. La aplicación de técnicas narrativas en la divulgación cultural es su principal ahínco, ya sea en formato audiovisual, literario o expositivo.
¿Cuándo, cómo y de quién surgió la idea de llevar a cabo esta exposición?
La Obra Social la ‘Caixa’ y la Cinemateca Francesa elaboraron un proyecto de exposición que se llamaba Méliès. La magia del cine, que se desarrolló en los CaixaForum de toda España hace algunos años. Después surgió la idea de hacer una muestra más compacta que pudiera itinerar por toda España. Así nació Empieza el espectáculo. Georges Méliès y el cine de 1900.
¿Cuál ha sido el objetivo de esta exposición? ¿Con qué finalidad se realizó?
El objetivo de esta exposición básicamente es que la gente pueda entender el nacimiento del cine como espectáculo de masas. El momento en el que el cine pasa a ser esa «gran fábrica de sueños» que ha sido durante todo el siglo XX. Divulgar ese periodo histórico tan rico y la figura de George Méliès para que llegue a todos los públicos.
En un futuro no muy lejano, ¿habrá más exposiciones de este tipo?
Estas exposiciones itinerantes que acercan la cultura a toda la población en todos los rincones de España son una apuesta de la Obra Social la ‘Caixa’. Este mismo formato se va a reproducir a lo largo de los próximos años con otros temas, para que la gente pueda acercarse tanto a la cultura como a la ciencia.
Como comisario de esta exposición, ¿qué dificultades ha tenido a la hora de abordar este gran proyecto? ¿A qué retos se ha tenido que enfrentar?
Lo más difícil, sin duda, es el hecho de tener que seleccionar material entre toda la obra de Georges Méliès que se custodia en la Cinemateca Francesa. Uno tiene un reto enorme al decidir: ¿Qué ponemos, cómo lo ponemos, qué sacamos? Sobre todo, justificar muy bien por qué dejas fuera algunas de las cosas que para alguien, seguramente son importantísimas. Hemos creado un relato, una exposición, para que la gente pueda entender el nacimiento del cine. Sin embargo, también somos conscientes que no podemos abarcarlo todo y hemos tenido que renunciar a cosas.
¿Cuánto tiempo lleva trabajando en este proyecto?
Esta exposición empezó su periplo en octubre del año 2015. Un año antes habíamos empezado a dar forma al proyecto, seleccionando material, visitando los fondos de la Cinemateca. Siempre acompañados por el trabajo extraordinario de los profesionales de la Obra Social ‘la Caixa’, el escenógrafo Ignasi Cristià y, por supuesto, la colaboración de todo el equipo de comisarios de la Cinemateca Francesa.
¿Cuáles fueron los factores que propiciaron que a finales del siglo XIX se inventara el cinematógrafo?
A finales del siglo XIX, el mundo vivía un momento de fuertes cambios tecnológicos y científicos. Tenemos que pensar que el desarrollo de la fotografía había llegado a tal punto, que era sólo cuestión de un empujoncito para crear una secuencia animada de fotografías que simulara el movimiento. El cinematógrafo no es otra cosa que la máquina que permitió proyectar rápidamente varias imágenes fijas para crear la ilusión óptica del movimiento.
Los hermanos Lumière fueron los que inventaron el cinematógrafo. ¿Qué repercusiones causó este invento científico en la sociedad de la época?
Hay unas palabras de Georges Méliès, que se pueden leer en la exposición, que definen extraordinariamente bien el impacto que causó el cinematógrafo. Georges Méliès cuenta cómo la visión del movimiento dejó estupefacta a la audiencia. Era la primera vez que se podían ver imágenes reales en movimiento. Esto era un cambio tan enorme que es equiparable a los cambios que podemos estar viviendo hoy en día. A partir de aquel momento, todo se podía animar y eso suponía la transformación de la manera de ver el mundo. La prueba es que no hemos dejado de hacerlo y de perfeccionarlo hasta nuestros días.
¿Qué fue lo que motivó a Georges Méliès para que se interesara por el cine?
Georges Méliès desde muy joven abandonó la empresa familiar y se dedicó al mundo del espectáculo. En París compró un pequeño teatro y se dedicaba al ilusionismo. Él tenía muy claro que quería divertir a la gente y sus espectáculos rápidamente cobraron una fama extraordinaria, en ese París de finales de la década de 1880 y principios de la de 1890. Cuando Georges Méliès descubrió el cinematógrafo, enseguida pensó que esas películas podían incorporarse a sus espectáculos. Intentó comprar un cinematógrafo a los hermanos Lumière, pero estos no se lo quisieron vender. Méliès consiguió un aparato equivalente en Inglaterra, y empezó a hacer sus propias películas.
Realmente, ¿quién fue el inventor del cine?
La mayoría de las veces, cuando vamos al cine queremos que nos cuenten historias. Si entendemos cine por espectáculo cinematográfico, es decir, el hecho de contar historias, Georges Méliès juega un papel fundamental. Gracias a la difusión de sus películas entre las clases populares de media Europa se forjó un público que aprendió a disfrutar con el cine.
¿Dónde se proyectaron las primeras películas? ¿Por qué posteriormente se proyectaron en las ferias?
En Francia, las primeras películas se proyectaban en teatros donde acudían burgueses y aristócratas. Esas primeras películas eran altamente inflamables y hubo algunas terribles desgracias como el incendio del Bazar de la Caridad de París, donde murieron 140 personas. La gente cogió miedo a ir al teatro a ver películas, porque cualquier pequeña chispa se podía convertir en fuego. Fue así como el cine pasó de proyectarse en los teatros burgueses a la feria, en el exterior. También cambiando la ubicación de las proyecciones, cambió el tipo de público. Si en el teatro, el público era eminentemente aristocrático y burgués, en las ferias eran obreros y gentes de clases populares, mucho más acostumbradas a la propuesta dinámica de imágenes en movimiento.
¿Por qué Georges Méliès es considerado el creador de la ciencia ficción en el cine? ¿Qué técnicas empleó para llevar a cabo esos efectos especiales a la pantalla?
Georges Méliès se había dedicado durante muchos años al ilusionismo. Él era un prestidigitador de fama en toda Francia. Rápidamente Méliès pensó que podía utilizar algún trucaje para incorporar a las nuevas películas ilusiones, trucos, que simularan sus números de magia. Aparte de eso, y lo bueno que tiene Georges Méliès, es que todos estos trucos los incorpora al relato de sus películas. Los trucos están al servicio de una historia.
Georges Méliès fue el primer director de cine de la historia, ¿qué aportaciones hizo? ¿Qué legado nos ha dejado? ¿Sigue influyendo a día de hoy en otros directores de cine?
Cuando afirmamos que Georges Méliès es el primer director de la historia del cine, queremos decir que él es el primero que cuenta historias pensando en su público. Eso claramente, es el gran legado de Georges Méliès.
Méliès también ha sido conocido como un hombre orquesta, ¿qué significa ser un hombre orquesta?
Georges Méliès en sus películas tocaba todos los instrumentos, por eso nos gusta llamarle hombre orquesta. Él hacía el guion de las películas, las dirigía, pero también actuaba en ellas, diseñaba el vestuario, construía los decorados, producía… Por tanto, él abarcaba todo el proceso de producción de una película, desde la idea hasta la distribución. Por eso nos gusta llamarle hombre orquesta.
¿Cómo ha cambiado el papel de los directores del cine en la actualidad?
Si decíamos que Georges Méliès era un hombre orquesta, hoy podríamos decir que los directores son directores de orquesta. Es decir, hoy en día un director de cine coordina el trabajo de los distintos jefes de equipos: el director de fotografía, el diseñador de sonido, el director de vestuario, el montador… y, por supuesto, toda la parte de actuación.
Thomas Edison, tuvo un papel importante en la historia del cine, sin embargo también se atribuía la autoría de inventos de otras personas por medio de la compra de patentes. ¿En qué medida Edison perjudicó a Méliès copiando ilegalmente sus películas?
Georges Méliès, aparte de ser el primer director de la historia del cine, como nos gusta llamarle, también contribuyó fundamentalmente a crear la industria cinematográfica. Creó una productora llamada Star Films, y su hermano mayor, Gaston, se encargó de ir a Nueva York a abrir mercado, ya en 1902. Allí se encontró con un personaje como Thomas Edison que tenía bien atado el mercado estadounidense y tenía fama de controlar todas sus películas y su distribución. Edison no facilitó el desarrollo de una industria, más allá de sus propias marcas.
¿Qué tipo de películas creaba Méliès?
Es importante entender que Méliès hacía películas para las clases populares. Las clases populares, a finales del siglo XIX, a duras penas tenían un día de descanso, el resto lo pasaban trabajando en la fábrica y cuando iban a la feria querían divertirse. Por lo tanto, Méliès lo que les daba era diversión, pero también instrucción, es decir, pretendía también culturizar a las clases populares. Eso es muy importante para entender que en todo el abanico de temáticas que tocó, encontramos por supuesto, trucos de magia, historias espectaculares de ciencia ficción como Viaje a la Luna, pero también encontramos episodios de La Odisea, encontramos clásicos de la literatura francesa, mitología… Méliès también quería aproximar la actualidad a las clases populares, reproduciendo en su estudio grandes acontecimientos de su época, como la coronación del rey Eduardo VII, batallas navales, o incluso, grandes erupciones de volcanes, que se producían en aquel entonces.
¿Qué trucajes realizaba en sus películas?, ¿puede equiparse con los de hoy en cuanto a calidad e innovación?
Bueno, no podemos equiparar nada porque el tiempo ha pasado y el cine ha evolucionado muchísimo. Básicamente podríamos destacar el truco de sustitución, el truco de sobreimpresión y los juegos. A través de estos trucos la Obra Social ‘la Caixa’ ha desarrollado el programa educativo Participa Méliès abierto a todos y que se puede encontrar en la página web www.participamelies.com.
¿Cuántas películas llegó a crear? ¿Con qué finalidad creaba sus películas? ¿Iba destinada a un público específico?
Georges Méliès llegó a rodar más de quinientas películas, de las cuales sólo se conservan unas trescientas, siempre con el objetivo de entretener e ilustrar a las clases trabajadoras en la Europa de su tiempo.
¿En qué se diferencia las películas de Méliès de los hermanos Lumière?
Los hermanos Lumière cuando inventan el cinematógrafo empiezan a hacer películas básicamente a partir de escenas de la vida cotidiana. La mayoría de las veces, no cuentan historias, sencillamente ponen la cámara y ruedan lo que está pasando. Georges Méliès crea la ficción, las historias. Esa es la gran diferencia.
¿Cuáles fueron los motivos que llevaron a Méliès al final de su carrera cinematográfica a acabar con casi toda su obra? ¿Cuántas películas se conservan?
La falta de reconocimiento y la falta de dinero le llevaron a la ruina absoluta. En un acto de desazón y frustración llegó incluso a destruir la mayoría de sus películas. Por suerte para la historia del cine, había muchas copias de sus películas que conservaban los feriantes. Aún tenemos la esperanza de recuperar la parte de su obra que está perdida. Sin ir más lejos, en 2017 se descubrió una película inédita de Georges Méliès en el Archivo Nacional de Cine de la República Checa. Estaba datada en 1904 y etiquetada con el título Les Transmutations Imperceptibles.
A partir de 1930, empiezan a aparecer las películas con color y sonido incorporado, ¿qué recursos emplearon para que esto fuera posible?
El cine cambia muchísimo a partir de finales de los años veinte y principios de los años treinta. Se convierte en una gran industria y evoluciona tecnológicamente con la incorporación del sonido y el rodaje en color.
¿Qué beneficios y desventajas ha aportado el cine para nuestra sociedad?
Desventajas, si me permite, yo no veo ni una. Beneficios, todos. Al fin y al cabo, los hombres vivimos de ficciones. Sí, necesitamos comer, necesitamos dormir, pero de la misma manera necesitamos que nos cuenten historias. Y el cine durante cien años ha sido una máquina perfecta de contar historias que ha alimentado los sueños de tantas y tantas generaciones.
Yo soy un amante del Cine…y la entrevista me parece genial y fantástica.
Un Arteciencia que. Forma parte de nuestras vidas…en todo el mundo.
El 7°Arte.
Gracias
Muchas gracias a ti por tu comentario.
Un abrazo.