Un déficit de este compuesto puede agravar la aparición de enfermedades cardiovasculares, cáncer o diabetes
El 62% de las mujeres asturianas embarazadas que forman parte del estudio presentan niveles inferiores de vitamina D a los recomendados por los expertos. Del total de las gestantes, el 27% tienen deficiencia, es decir, que carecen de vitamina D y el 35% insuficiencia, no llegan al mínimo recomendado, según el estudio de Prevalencia de deficiencia e insuficiencia de vitamina D y factores asociados en mujeres embarazadas del norte de España, Ana Cristina Rodríguez-Dehli y colaboradores.
Comparación de los niveles de Vitamina D en verano y durante todo el año// Fuente: estudio
El estudio establece que el nivel de suficiencia recomendado de esta vitamina es a partir de 30 ng/ml (nanogramos por mililitro). Además, la mayoría de expertos aceptan la definición de deficiencia por debajo de 20 ng/ml e insuficiencia entre 20-29 ng/ml. Sin embargo, existe cierta controversia de cuáles son los niveles óptimos.
La vitamina D es esencial en la absorción de calcio y fósforo del organismo, es como un pegamento que hace que el cuerpo pueda absorber mejor estos componentes. Son muchas las investigaciones que se han realizado sobre este compuesto, y los resultados muestran que un déficit del mismo podrían ser un agravante en la aparición de enfermedades como diabetes tipo 1 y 2, enfermedades cardiovasculares, infecciones, obesidad o asma. Así como también, algunos tipos de cáncer como el de colon, mama, próstata y ovario y de ciertas enfermedades neurológicas como la depresión o esclerosis múltiple. El estudio revela que las mujeres con sobrepeso y las menores de 25 años son un grupo más propenso a sufrir la carencia de este compuesto. Por consiguiente, niveles bajos de esta vitamina durante la gestación se han asociado con un aumento de efectos adversos en el desarrollo y crecimiento fetal; como son la preeclampsia – la hipertensión arterial durante el embarazo – o la diabetes gestacional.
La vitamina D es esencial en la absorción de calcio y fósforo del organismo
La mejor forma de acceder a esta vitamina es mediante la exposición solar, siendo, por tanto, su limitada exposición la primera causa de su deficiencia. como es el caso del norte de España, donde escasea gran parte del año. Pero existen complementos y alimentos, como algunos pescados azules, lácteos o huevos que la contienen, y cuyo consumo es recomendable en este tipo de circunstancias.
Cada vez hay más estudios que plantean la necesidad de ingerir este complemento durante la gestación, aunque sin evidencias exactas que garanticen ni establezcan cuál es la dosis adecuada.
Para obtener los resultado se ha analizado a mujeres embarazada de 10 a 13 semanas y de edades comprendidas entre 18 y 42 años mediante un cálculo analizando la dieta de las participantes – con un cuestionario de más de cien preguntas – y los suplementos que tomaban. Sin embargo, tan solo el 8,6% afirmaron consumir esta vitamina. No obstante, esto no sucede solo en las embarazadas, puesto que en los últimos 10-20 años se ha observado una tendencia mundial a la caída de los niveles de vitamina D, sobre todo en la población más joven.
Laura Torralba Córcoles y Francesca Zoicas